El pasado 2 de enero de 2019 fue día muy triste para todos los que fuimos alumnos del profesor Josep Maria Domènech Mateu, catedrático de Anatomía y Embriología en la Facultad de Medicina de la Universitat Autónoma de Bellaterra (UAB) que falleció a los 74 años.
Discípulo brillante del gran anatomista español Francisco Orts Llorca, ganó las oposiciones a cátedra siendo muy joven. Muy pronto, su extraordinaria capacidad docente y su genial proyección como investigador en la embriología del corazón y del sistema nervioso, hicieron que el Departamento de anatomía humana de la UAB se convirtiese en un centro de referencia a nivel mundial.
Sus clases, siempre abarrotadas, eran una muestra del entusiasmo que ponía en que sus alumnos no solo aprendieran anatomía si no qué disfrutaran estudiando. Al final, como siempre, tuviste razón y lamentamos que la carrera se acabara. Mi querido profesor, recuerdo ahora, como si fuera ayer, el día que te conocí y la cordialidad con que me acogiste y tu emoción cuando hablabas de mi abuelo Salvador. Tuve la inmensa fortuna de pasar muchas horas en el departamento como alumno interno y conocer a otros jóvenes profesores, como José Ramón Sañudo, hoy catedrático de Anatomía de la Universidad Complutense, que aprendían a tu lado. Siempre fueron inolvidables tus lecciones, tanto en el aula como frente al cadáver o en el microscopio. Hoy, ante el dolor de tu muerte, quiero recordar que fuiste el mejor profesor que en mi vida he tenido y que despertaste, de esto estoy muy seguro, en tus alumnos el deseo de ser mejores médicos cada día. ¡Sit tibi terra levis!
Dr. José María Gil-Vernet Sedó